Un niño de 4 años sufrió el ataque de un perro de la raza rottweiler que no llevaba bozal. El incidente ocurrió el Día de la Madre mientras el menor paseaba con su padre por el Paseo de Recoletos, en el distrito de Salamanca. Testigos intentaron sin éxito liberar al niño del ataque del animal, lo que llevó a llamar a los servicios de emergencia.
Agentes de la Policía Nacional que respondieron a la emergencia tuvieron que utilizar en dos ocasiones una pistola táser para conseguir que el perro soltara al niño. Una unidad del Samur-Protección Civil atendió al menor en el lugar de los hechos. Posteriormente, agentes de la Policía Municipal acudieron y multaron a la dueña del perro por infringir la normativa de seguridad, que exige el uso de bozal en vías públicas para razas consideradas peligrosas.