En los último años las muñecas sexuales han tenido un gran auge en Japón, convirtiéndose en algo más que compañeras de cama para muchos solteros, y la empresa Ningen Love Doll ha querido que sus clientes puedan dar un último adiós a sus muñecas con un funeral oficiado por la actriz porno Rei Kato.
En el país asiático hay una creencia popular que dice que todos los muñecos tienen alma, por lo que tirarlos a la basura da mala suerte. Si a eso le sumamos el estigma que hay con ese tipo de muñecas así como las dimensiones y materiales de las mismas, el deshacerse de ellas cuando su ciclo de “vida” ha terminado se convierte en una tarea algo más complicada, por lo que hay que llamar a un empresa especializada y pagar por el servicio.
Como siempre hay quien quiere ir un paso más allá y no desechar su muñeca como si fuera un simple juguete, Ningen Love Doll ofrece diferentes funerales para rentabilizar el cariño hacia esas muñecas.
Por unos 250€ pueden optar por el Plan Funeral Conjunto, donde se desechan varias muñecas a la vez y se entrega una foto conmemorativa al propietario.
Si el amor hacia la muñeca requiere algo más personal, el Plan Funeral Estándar (410€) ofrece un funeral individual además de un certificado de defunción junto con la foto o video conmemorativo.
Para un adiós por todo lo alto, con el Plan Funeral de Muñeca de Ángel (750€), el dueño puede acudir personalmente al funeral y ver como desmontan pieza a pieza a su muñeca. Además, puede leer una última carta a la muñeca y se llevará una de sus piezas de recuerdo.
Tras los funerales, todas las muñecas se envían a una empresa de procesamiento de residuos industriales.
Este servicio no es exclusivo para muñecas sexuales, también está disponible para muñecas normales, peluches y figuras.