Que Madrid es un no parar de gente en movimiento no es nada nuevo, no el balde las cifras lo corroboran de forma bastante clara: 15,8 millones de viajes al día, lo que viene a ser una media de 2,4 viajes y 17 km por persona.
La Encuesta de Movilidad de la Comunidad de Madrid presenta la evolución de la movilidad en la ciudad desde el 2004, fecha en la que se realizó el último estudio.
Uno de los primeros datos que se hace notar, es la caída de población y empleo en la almendra central de Madrid, aumentando en zonas más alejadas de la capital. Este cambio ha llevado a un crecimiento del uso del coche, que ha aumentado un 5% entre 2004 y 2018, siendo este tipo de vehículo el elegido para 1 de cada 4 trayectos que se realizan en la Comunidad, especialmente fuera de la almendra central, donde el transporte público tiene más protagonismo.
Por otro lado, ha habido un cambio notable en el número de desplazamientos en bici o a pie. La bicicleta ha multiplicado por cinco su uso y las caminatas han aumentado un 20%, desde el 2004, cifras que, probablemente, seguirán con esa tendencia al crecimiento en los próximos años.
El principal motivo de los desplazamientos sigue siendo el trabajo, seguido por los estudios, compras, asuntos personales y deporte.
Por rangos de edad, menores de 18 y mayores de 64 utilizan menos el coche, mientras que a partir de los 18 aumenta su utilización. Según la encuesta, son los hombres lo que más uso dan al vehículos privado mientras que las mujeres son mayoría en desplazamientos a pie o en transporte público.
Lo que deja claro la encuesta es que es evidente que desde el 2004 han cambiado las cosas en cuanto a movilidad se refiere, sobre todo cuando hablamos de transportes más ecológicos o sostenibles, pero algo no se está haciendo del todo bien cuando no solo no se ha conseguido reducir el número de viajes en coche, sino que ha aumentado, alcanzando un 39% del total. Como siempre, la responsabilidad de que esto sea así recae en demasiados sectores, a lo que sumando la complejidad que de por si tiene el problema, nos lleva a una difícil solución, al menos a corto plazo.