Cuando hablamos de ganadería sostenible nos referimos a un tipo de ganadería responsable. Un tipo de ganadería que tiene en cuenta a las personas, a los animales y al medio ambiente y que vela por el bienestar de todos ellos.
¿Por qué ganadería sostenible?
Tras siglos de producción incontrolada, la sociedad actual se está viendo obligada a recalcular el rumbo si queremos salvaguardar el planeta y los recursos que, aunque creíamos infinitos, cada vez van siendo más escasos.
Hay que recordar que no solo se trata del bienestar animal y del medio ambiente. No nos olvidemos de la cantidad de evidencia científica que actualmente afirma que comer animales criados de forma sostenible como ternera de pasto o pollos de corral, es mucho más beneficioso para nuestra salud que comer carnes provenientes de animales criados en jaulas y en condiciones que en muchos casos son bastante reprochables.
La ganadería sostenible se basa en un proceso en el que los recursos naturales fluyan en armonía con la necesaria competitividad económica actual.
Un concepto clave para entender los beneficios de este tipo de ganadería es eficiencia. entendiendo eficiencia no como la capacidad de criar el mayor número de animales posible en el menor espacio posible y a cualquier precio para el medio ambiente y los seres humanos. Se trata de lograr una eficiencia natural en la cual se tengan en cuenta todos y cada uno de protagonistas implicados en el proceso. Desde el animal hasta la persona que consumirá los productos, pasando por los suelos, el agua, el aire o la manera en que alimentamos a dichos animales, priorizando el bienestar de todos y cada uno de ellos.
Por lo tanto, hablamos de una eficiencia que aportará valor ambiental, social y económico.
Para ello, quienes quieran gestionar este tipo de explotaciones deben conocer y entender la naturaleza como un conjunto y no como un manojo de recursos y seres vivos separados, sin relación ninguna entre ellos. Ese conocimiento mezclado con respeto y apoyado en la tecnología puntera actual, es lo que genera entornos amigables para el desarrollo de la ganadería. Empresas como livestock datamars ayudan desde hace más de 30 años tanto a explotaciones ya consolidadas como a nuevos emprendedores que quieren unirse a un negocio que mira por el futuro.
¿Qué convierte a una explotación ganadera en sostenible?
- Ayuda a mantener o restaurar ecosistemas
- Uso correcto de los suelos
- Proporcionar hábitats para la biodiversidad
- Mayor uso de energías renovables y menos contaminantes.
- Minimización de residuos, priorizando los que se puedan reciclar en la propia explotación.
- Minimizar uso de antibióticos
- Preservar zonas naturales
Por último, nosotros, como consumidores también debemos informarnos del papel que este tipo de ganadería va a representar en nuestro futuro y en nuestro presente. Algunas de las crisis a las que a nivel global nos enfrentamos hoy en día, como pueden ser el cambio climático, la destrucción de biodiversidad y una salud pública mediocre, podrían verse beneficiadas si poco a poco vamos ampliando el porcentaje de este tipo de producción a la par que reducimos la intensiva alimentada con grano.
De todos depende un futuro mejor.