La Asociación Vecinal Pasillo Verde-Imperial y las AMPAs de los centros educativos IES Gran Capitán y CEIP Tomás Bretón han manifestado su rechazo frontal a la decisión del Ayuntamiento de Madrid de destinar una parcela del ámbito Mahou-Calderón a la construcción de un museo de la Empresa Municipal de Transportes (EMT). Según denuncian, la medida vulnera la memoria vinculante del APE 02.27 “Nuevo Mahou Calderón”, que establecía un uso diferente para estos terrenos.
Las asociaciones recuerdan que la parcela en cuestión, de unos 4.500 metros cuadrados, fue el resultado de años de negociaciones con el Consistorio y los promotores del ámbito, el Atlético de Madrid y Mahou San Miguel, que culminaron en la aprobación de la modificación del plan urbanístico en 2017. La memoria vinculante del proyecto, aseguran, es un compromiso que el Ayuntamiento no puede obviar, y citan una sentencia del Tribunal Supremo de 1977 para respaldar que estos documentos tienen un carácter obligatorio.
El uso previsto para estos terrenos incluía la ampliación del IES Gran Capitán, del CEIP Tomás Bretón, y la construcción de nuevas instalaciones deportivas para el disfrute de los vecinos y vecinas del barrio de Arganzuela. Sin embargo, el anuncio de la creación de un museo en lugar de un polideportivo ha provocado la indignación de la comunidad, que acusa al Ayuntamiento de priorizar un “polo de atracción turística” sobre las necesidades locales.
La polémica ha escalado desde que, en el pleno de la Junta Municipal de Arganzuela de abril de 2024, la Asociación Vecinal Pasillo Verde-Imperial preguntó por la construcción de equipamientos deportivos ante la saturación del centro deportivo Marqués de Samaranch. La respuesta del coordinador del distrito indicaba que la Junta Municipal había solicitado el uso deportivo de la parcela en marzo de 2024, lo que contrasta con el giro anunciado por el Consistorio hacia un museo de la EMT.
La “operación Mahou-Calderón”, inicialmente destacada por su alto nivel de participación ciudadana, ahora se encuentra en el centro de una controversia. Las asociaciones denuncian la falta de diálogo del Ayuntamiento y advierten de las implicaciones que este cambio de rumbo podría tener para el urbanismo en Madrid. Temen que el cambio de uso de la parcela siente un precedente negativo, permitiendo que un alcalde modifique el destino de terrenos dotacionales sin atender a la voluntad vecinal ni a la memoria vinculante.
La noticia también ha generado sorpresa por la implicación del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM), que ha ofrecido su apoyo técnico para organizar un concurso público de proyectos para el nuevo museo. Las asociaciones consideran que este respaldo contrasta con las necesidades de los estudiantes del IES Gran Capitán, quienes reivindican más espacios para actividades como la Educación Física.
Las asociaciones vecinales y AMPAs de Arganzuela han anunciado que no permanecerán de brazos cruzados ante lo que consideran un “absoluto atropello”. Rechazan lo que califican como una política orientada a convertir Madrid Río en un parque temático, sin tener en cuenta a quienes viven y trabajan en la ciudad. En respuesta, aseguran que emprenderán todas las acciones necesarias para conseguir las instalaciones deportivas que, dicen, el distrito necesita urgentemente.