El icónico Café Santamaría, ubicado en el barrio madrileño de Delicias, cerró sus puertas el pasado 15 de septiembre después de cinco décadas de actividad. Su propietario, Juan Díaz, quien ha estado al frente del establecimiento desde 1979, se vio obligado a clausurarlo debido al impacto que han tenido las obras de ampliación de la Línea 11 de Metro. El ruido constante, el polvo y las vallas que rodean el negocio han ahuyentado a los clientes, haciendo que el café se volviera insostenible económicamente.
La cafetería, conocida por su ambiente acogedor y sus vínculos con el Teatro Nuevo Cómico, fue durante años un punto de referencia para artistas como Eduardo Aute, Paco Rabal o Saura. Sin embargo, las obras que comenzaron en agosto no solo afectaron al flujo de clientes, sino también a la seguridad en la zona. Juan explicó que la calle Áncora se ha vuelto peligrosa por la noche, con un aumento de incidentes delictivos que incluso llegaron a poner en riesgo a sus empleados.
Pese a su deseo de jubilarse y dejar el negocio en manos de uno de sus trabajadores, la situación lo obligó a cerrar antes de lo previsto. A sus 66 años, Juan asegura que no se trata de un cierre definitivo y que tiene la esperanza de reabrir cuando las obras finalicen, previstas para mayo de 2025. Mientras tanto, el barrio pierde un referente más, y otros negocios cercanos ya evalúan seguir el mismo camino.
Los vecinos, por su parte, han expresado su malestar por las molestias generadas por las obras y la falta de medidas que mitiguen el impacto en la vida del barrio. Las asociaciones vecinales han denunciado al Gobierno de la Comunidad de Madrid por saltarse normativas durante la ampliación del metro, y reclaman soluciones urgentes ante la crisis que atraviesa la zona de Delicias.