En el distrito de Arganzuela, en Madrid, específicamente en las calles Puerto de Béjar, Puerto de Miravete y Puerto de la Cruz Verde, los residentes han emitido una preocupante señal de alarma debido a la creciente presencia de roedores en los tendederos y las plantas superiores de los edificios. La Asociación Vecinal Nuevo Legazpi está exigiendo de manera urgente una acción coordinada entre el Ayuntamiento y los administradores de los portales afectados para poner fin a este problema.
Estos roedores se han vuelto ubicuos en la zona, apareciendo en las calles, portales, balcones e incluso en el interior de algunas viviendas. En los últimos días, se les ha observado en los pisos más altos de algunos edificios, alcanzando incluso los sextos y séptimos pisos, así como en los tendederos. El Barrio de los Puertos, en Arganzuela, ha estado experimentando una verdadera plaga de ratas desde hace semanas, aunque el problema tuvo sus inicios durante el verano, después de que el Ayuntamiento llevara a cabo trabajos de ampliación de aceras en la calle Puerto de Béjar. Estas obras dejaron las canalizaciones de agua al aire libre durante aproximadamente tres meses, lo que, sin duda, brindó a los roedores una oportunidad para salir al exterior y encontrar refugio en los edificios residenciales. En la actualidad, este problema afecta a varias centenas de familias que residen en las calles Puerto de Miravete, Puerto de la Cruz y la mencionada Puerto de Béjar.
Los vecinos han denunciado que tanto el Ayuntamiento como los administradores de los edificios tienen conocimiento de la situación, pero hasta ahora, parece que la resolución del problema se ha quedado estancada. Los residentes han presentado quejas y demandas en el Departamento de Control de Vectores del Ayuntamiento, y los técnicos de este servicio han visitado la zona para colocar trampas en el subsuelo. Asimismo, las comunidades de propietarios han intentado frenar la propagación de los roedores mediante la instalación de sus propias trampas.
Sin embargo, estas acciones no han logrado reducir la molestia causada por esta plaga, y dado los evidentes riesgos para la salud de los residentes y la asociación vecinal del barrio, han decidido hacer sonar la alarma. Por lo tanto, la Asociación Vecinal Nuevo Legazpi está solicitando al equipo de Gobierno de José Luis Martínez-Almeida una intervención urgente y coordinada con los administradores de los edificios, con el objetivo de poner fin de una vez por todas a un problema que ya se ha prolongado durante demasiado tiempo.