La DGT quiere acabar con el frenazo justo antes del radar con el que muchos conductores se libran de las multas.
Para ello se han creado los llamados radares anti-frenazo. El funcionamiento es muy parecido al de los radares en cascada, pero a la inversa. El método de los radares en cascada consiste en poner un radar fijo antes del radar móvil, de manera que si el conductor acelera después de pasar el primer radar, el siguiente le pillará in fraganti. La DGT afirma que ese método funcionó muy bien pero, con el tiempo, los conductores ha tomado buena nota y no aceleran antes de recorrer uno o dos kilómetros más.
El sistema anti-frenazo coloca los radares al revés. Primero un radar móvil y el fijo unos dos kilómetros después, con lo cual el frenazo antes de pasar el fijo no servirá de nada, ya que el radar móvil habrá registrado la velocidad a la que circulaba el vehículo.
Después de haberse instalado probado en Navarra se está estudiando si el radar anti-frenazo se incorporará definitivamente en todo el territorio.